En Chicago la soja mantiene un tono moderadamente positivo con la prima de riesgo por la falta de lluvias especialmente en Argentina pero sin fuerza todavía para un rebote que lleve a los precios locales por encima de los US$ 360/t. La ausencia de precipitaciones en el corto plazo lleva a que los productores en Uruguay sigan fuera del mercado apostando a que se normalicen en diciembre las precipitaciones.
Este lunes el contrato julio ganó US$ 1,3/ton para cerrar en US$ 376,8 por tonelada.
La especialista del INTA de Argentina, Stella Carballo, dijo al programa Tiempo de Cambio de radio Rural que recién sobre la segunda mitad de diciembre las precipitaciones se ubicarían en niveles promedio para ese mes.
En Twitter la firma Granosur reportó un 78% de avance de siembra de soja de primera entre sus clientes. “Actualmente en el litoral se sigue sembrando a buen ritmo, pero las chacras del Este del país se encuentran paradas por falta de humedad y falta de pronósticos firmas de lluvias”.
A la falta de lluvias en Argentina –también en Uruguay- se contrapone el muy buen régimen hídrico en buena parte de Brasil. Dentro de las características más clásicas de un evento Niña se ve que en el Sur de Brasil empiezan a ser limitadas las lluvias.
Otro factor negativo para los precios de la soja en Chicago es el ritmo de exportaciones. Si bien la demanda es firme, la producción estadounidense tuvo que competir con el remanente de oferta que había en Brasil. De acuerdo a los datos del USDA, los negocios de exportación de soja se ubican 17% por debajo de un año atrás en la semana cerrada el jueves 16. En tanto, el organismo prevé para 2017/2018 un incremento de 3,5% en las exportaciones.
Si bien recién se está en el primer trimestre de la campaña 2017/2018 (setiembre-agosto), los analistas dudan que se pueda llegar al pronóstico de exportaciones del USDA a no ser que haya un quiebre significativo en la producción de América del Sur.
Es así que en el corto plazo no se ven variaciones significativas en las cotizaciones en Chicago ni en las decisiones de venta de los productores locales.
Fuente: Blasina y Asociados
Add comment